Que nada se me caiga…

El deporte es una actividad que las mamás siempre relegamos, generalmente por  falta de tiempo y para ser más sinceras, muchas veces lo postergamos porque creemos que nuestro cuerpo de sirena nos acompañará por el resto de nuestras vidas. Lo cierto es, que los años te juegan una mala pasada y nuestro aspecto físico  va cambiando para mal , sobre todo cuando pasas los 40.

En diciembre pasado, fui a comprar un vestido para Año Nuevo y ninguno me quedaba bien, me sentía tan frustrada de no encontrar algo que me haga lucir estilizada. Por esas fechas, todas las grasas de mi cuerpo se habían confabulado para concentrarse en mi abdomen, mis caderas, mis brazos…me sentía  enorme por todos los ángulos.

Durante mucho tiempo había dejado de lado el deporte, pues ir al gimnasio me resultada un estrés, más que un placer. Entre ir y venir en las mañanas, me comía dos horas de mi tiempo, y sin contar el gasto del gimnasio y la gasolina que consumía para trasladarme. Todo eso ya sumaba en contra.

Era más fácil dejarlo, que encontrar alguna alternativa. El hecho es, que sin deporte por mucho tiempo y viendo mi cuerpo tan mal proporcionado, decidí un buen día levantarme a las 5 de la mañana y dar mi primera vuelta al Pentagonito. Bueno, en realidad pensé darme una vuelta, pues casi terminé arrastrándome hasta mi casa,  porque a los diez minutos de trote estaba re cansada y no podía respirar.

Encima me sentía ridícula, pues mientras yo iba casi desmayada por la verada., observaba como otras mujeres (encima regias) corrían por mi costado muy ligeras y disfrutando lo que hacían…Por Dios, lo veía en sus rostros!!!.Qué envidia sentía, qué envidia!!!

Pero el sentirme así me sirvió de impulso, ya que a partir de ese día el trotar y correr se convirtió en casi una rutina. Les juro, que fueron muchas las veces que luché contra mi sueño y mi cansancio, pero le puse voluntad. Ya pasaron 5 meses y sigo corriendo. Ya no lo hago todos los días, pero mínimo tres veces por semana y lo rico es, que no sólo me siento bien físicamente porque bajé más de ocho kilos, sino que esos 40 minutos en la mañana, me desconectan del mundo entero, son míos totalmente…

Sólo es cuestión de decidirnos, no es necesario correr 5 kilómetros diarios, tal vez sólo caminar, hacer yoga, ir al gimnasio, bailar, pero es importante amigas, empezarnos a cuidar, porque conforme avanzan los años, resulta más difícil mantener ese cuerpo ideal con la que todas soñamos. Mi objetivo es: Que nada se me caiga!!!

Una vez que le toman gusto hacer deporte, les encantará visitar de vez en cuando las tiendas deportivas, pues hoy encontramos cosas lindas para lucir, pues ahora tenemos que esmerarnos vernos lindas a toda hora del día, sin importar qué actividad estamos realizando.

Espero que puedan contarme si ya se animaron y cómo les va haciendo un poco de deporte.